jueves, 31 de diciembre de 2015

Feliz AÑO NUEVO!!!


Este año construye tu propio jardín. Planta semillas, riégalas, préstales atención y hazlas crecer día a día. Cultiva el AMOR.

Para ti ¿cuáles son las semillas más importantes que plantarías en tu jardín?.

Os deseo un FELIZ AÑO 2016 !!!!
 
Un fuerte abrazo,

Cristina


 
 
 

GRATITUD


Queridos lectores, compañeros/as y amigos/as,

A lo largo de estos cinco meses hemos construido un puente de conexión ente nosotros. La construcción de este puente me ha permitido escribir, contar y crear  una historia sobre la metodología del Coaching personal.

No es fácil ponerse delante de una hoja en blanco y querer expresar a través de las palabras lo que quieres transmitir, dar a entender y hacer llegar a todos. A veces te entra pánico y no sabes qué poner. Pero poco a poco las ideas van moldeándose y transformándose hasta que encuentran su propia voz e impulso para salir a la superficie y plasmarse en el papel. Escribiros me ha ayudado a superar miedos e inseguridades y ahora me siento con más fuerza para seguir contándoos más cosas sobre el método que mejora el rendimiento de las personas, el Coaching.

Quería expresaros mi gratitud por el vínculo establecido que nos une y que hace que yo escriba y que vosotros me leáis. Sin este apoyo no existiría el blog “Esencia-ch”. Es muy agradable saber que estáis ahí!.

Aprovecho también para dar las GRACIAS a todas las personas que me han animado y confiado en mí. En especial a todos mis coachees, ya que han sido estrellas de luz en mi camino. Gracias a ellos he podido desarrollar mis habilidades, poner en práctica mi conocimiento y mi saber.

Me queda mucho sendero que recorrer, pero todos me habéis ayudado a avanzar y a crecer como persona.

Gracias de todo corazón.

Cristina

miércoles, 30 de diciembre de 2015

Las PREGUNTAS


Tal y como os comenté en el artículo anterior, en un proceso de Coaching (ch) la metodología que  se emplea es la conversación. Por ello, hoy me gustaría escribiros unas palabras sobre  Las PREGUNTAS. 

Las PREGUNTAS son la forma de comunicación principal en el Coaching.  Ellas te invitan a abrir las puertas hacia el interior de ti mismo, a conectar con tu ESENCIA y a pensar. Sócrates ya practicaba con sus discípulos: la mayéutica, el arte de la interrogación.  Invitaba a sus seguidores a través de la conversación y las preguntas a que tomasen conciencia y aprendieran a conocerse mejor a sí mismos y a liderar sus vidas. Seguro que te estás preguntando ¿para qué?, pues para que la persona sea responsable y consciente de sus pensamientos, de sus emociones, de sus sentimientos, de sus decisiones y acciones. Ya que en función de todo ello, obtendrá unos resultados determinados.

En una sesión de coaching las preguntas tienen una función secreta que cumplir. Se efectúan por etapas diferentes. Pero… ¿sabes lo que es significativo?, LAS RESPUESTAS.

Las preguntas te ayudarán a encontrar las respuestas para: 
    • Establecer la meta
    • Examinar la realidad
    • Explorar la situación presente
    • Encontrar opciones, estrategias y  posibilidades alternativas
    • Determinar:
      • Qué harás
      • Cuándo lo vas hacer
      •  Quién lo hará 
      • La voluntad de hacerlo

Al iniciar la sesión te plantearás un objetivo, lo  irás perfilando a lo largo de la misma y al finalizar, saldrás con un propósito para llevarlo a la acción. Es imprescindible que puedas y quieras hacerlo. Persiste hasta lograrlo.

Como decía Walt Disney: “La mejor manera de empezar algo es dejar de hablar de ello y empezar a hacerlo”.

Ten en cuenta que tus palabras expresaran hacia dónde quieres ir, pero son tus acciones las que te llevaran hasta allí. Palabras y acción son una combinación perfecta para poner en práctica el HACER. Hacer que las cosas sucedan para progresar y llegar.

El verdadero trabajo es el que tú realizas entre sesión y sesión. Ya que has de llevar a cabo lo que te comprometiste a realizar. Cada pequeña acción te ayudará a avanzar y reducir el camino hasta tu meta.
   
¿Qué necesitas saber de ti para  desarrollar todo tu potencial?

 ¿Cuál sería  tu respuesta?

sábado, 26 de diciembre de 2015

jueves, 17 de diciembre de 2015

¿CONVERSAMOS?


Querido lector/a, ahora que ya has elegido tu camino, ¿qué te parecería si conversáramos?
Nos comunicamos a través del lenguaje.  A partir del lenguaje y de las palabras construimos nuestros modelos mentales del mundo y  estos ejercen una tremenda influencia sobre la manera en que percibimos la realidad y respondemos ante ella.

Sigmund Freud opinaba que las palabras son el instrumento básico de la conciencia  humana. Las palabras tienen poder para generarnos efectos positivos, pero también pueden confundirnos, ser destructivas y limitarnos. A través de ellas, levantamos puentes o alzamos muros.
Las conversaciones son la clave para penetrar en el profundo misterio del alma del ser humano. El diálogo nos hace conscientes y siempre necesitamos a otra persona, para que así, pueda hacernos de espejo y podamos vernos a nosotros mismos. 
En un proceso de Coaching (Ch) la metodología que  se emplea es la conversación y las preguntas. El Coach posee todas las preguntas y el  coachee todas las respuestas. Por ello, el diálogo es el ARTE DE LA TRANSFORMACIÓN y consigue provocar cambios espectaculares. 

Como decía Galileo: “No se puede enseñar nada a un hombre... sólo se le puede ayudar a encontrar la respuesta dentro de sí mismo”. Y esto exactamente es lo que hace el coach durante el proceso. 

A través de las palabras y del diálogo invita al coachee a la reflexión, a la toma de conciencia y al hacer (actuar). En el transcurso de la conversación el coachee descubre cual ha sido su manera de funcionar automática y  los resultados obtenidos hasta ese preciso momento. Es en ese instante cuando el tiempo se detiene y la persona identifica que tiene que cambiar y en qué  medida tiene que hacerlo para conseguir el resultado deseado. Esa décima de segundo es mágica. Implica para la persona un cambio de paradigma, determinar un nuevo rumbo a caminar y  emprender nuevas acciones.
Después de mis palabras, ¿qué necesitas para qué conversemos?